Circuito cerrado con llave de tres vías
para la infiltración de anestesia y
tumescencia en cirugía capilar
for anaesthesia
and tumescent
infiltration in hair surgery
Introducción
En los centros sanitarios especializados en microcirugía capilar en España es habitual el empleo de cubetas médicas, utilizadas en cirugía capilar para la preparación de la anestesia y tumescencia.
La revisión de la literatura científica, en la búsqueda de referencias sobre los recipientes donde se deberían realizar las formulaciones anestésicas, apenas arroja resultados. Sin embargo, el uso de cubetas médicas está muy extendido en la práctica habitual.
Este procedimiento permite formular y preparar la solución destinada a la anestesia y tumescencia del paciente en cubetas; lo que obliga al cirujano o técnico capilar a extraer la aguja para cargar la jeringa y volver a insertar de nuevo la aguja. Esta manipulación continuada durante el procedimiento de anestesia y tumescencia conlleva un riesgo muy elevado de sufrir un pinchazo accidental con la aguja.
También es destacable que, durante todo el procedimiento la formulación realizada en la cubeta queda expuesta a partículas en suspensión, lo que posibilita la contaminación del fluido contenido en esta, que se ve favorecido porque los procedimientos en microcirugía capilar toman tiempos prolongados, oscilando su duración de 4 a 10 horas, en función de la complejidad que entraña cada caso. Es fácil entender que en tan dilatado período temporal la contaminación es un factor relevante que conviene tener muy en cuenta.
El objetivo del presente trabajo es exponer un método alternativo de circuito cerrado con llave de 3 vías, más seguro para el profesional y para el paciente, destinado a desterrar el uso de cubetas en los procedimientos de cirugía capilar.
Material y método
A fin de conocer si el uso de cubetas médicas durante la administración de la anestesia y tumescencia es habitual entre los cirujanos de España se realizó una encuesta a técnicos capilares sobre este particular, con la condición de que su experiencia en trasplante capilar fuera superior a un año. La encuesta se realizó el 2 de agosto de 2023, fue enviada online y se pidió que se cumplimentara de forma anónima, sin indicar datos personales. Además, se preguntó si el empleo de cubetas llevaba asociado accidentes por pinchazos debidos a los cambios de aguja durante el proceso de recarga de jeringas para aplicar la anestesia y/o la tumescencia.
La encuesta constaba de 7 preguntas, cada una con respuesta de selección única. Una vez recogidos los datos, se procesaron usando SPSS v. 29.0.1.0 para Windows (IBM), realizando una estadística de tipo descriptivo.
Resultados
La encuesta fue enviada a 42 técnicos capilares en activo en el territorio español, de ellos respondieron y remitieron la encuesta cumplimentada un total de 21. Del total de encuestados, el 61,9% eran mujeres. El 23,8 % tenía una experiencia en trasplante capilar comprendida entre 3 y 5 años, y el 71,4% superaban 5 o más años. Además, el 76,2% había trabajado con más de 5 cirujanos diferentes.
De todos los encuestados, el 95,2% realizaban cargas y recargas de jeringas desde una cubeta médica durante el proceso de administración de anestesia o tumescencia, y el 100% realizaban sustituciones de las agujas desde la jeringa, extrayendo y volviendo a insertar la aguja en esta. Entre los encuestados, el 71,4% refirió haber tenido, al menos un accidente laboral por pinchazo de aguja durante el proceso de administración de anestesia o tumescencia; de estos, el 53,3% refirieron dos o más pinchazos (Tabla I).
Discusión
A pesar de no haber un consenso sobre el uso de cubetas para la anestesia y tumescencia, su empleo es una práctica habitual cuando se realiza cirugía capilar en España. En el presente estudio, destaca el elevado porcentaje de técnicos capilares encuestados que manifiestan haber sufrido pinchazos accidentales, al cargar y recargar la jeringa desde la cubeta que contenía la anestesia, mientras asistían al cirujano en la cirugía capilar.
Es muy importante destacar la prohibición de volver a encapuchar las agujas, como parte de la aplicación de las precauciones estándar de previsión de pinchazos accidentales entre el personal sanitario. Además, el Instituto Nacional para la Seguridad y Salud Ocupacional Americano (National Institute for Occupational Safety and Health, NIOSH) recomienda eliminar el uso de dispositivos con agujas cuando existen alternativas seguras y efectivas1,2,3.
Respecto a posibles alternativas, en 1948, Bierman describió una válvula de infusión de tres vías para facilitar el intercambio entre la sangre y los fluidos biológicos4. La válvula permite que la jeringa pueda realizar la recarga sin necesidad de retirada o volver a encapuchar las agujas. Además, tiene un circuito de fluidos totalmente cerrado, y por tanto estéril. En 2011, Lapid presenta un método similar, pero adaptado para la infiltración de anestesia tumescente en los procedimientos de liposucción. Al igual que el dispositivo de Bierman, se trata de un montaje utilizando un sistema de infusión y una válvula de tres vías. El montaje y uso de este sistema resulta sencillo y de bajo coste5.
Desde enero de 2022, en nuestro centro se implementó un sistema similar adaptado al trasplante capilar. La infiltración de anestesia y tumescencia se realiza mediante un circuito cerrado con llave de tres vías (IATCC3V). De esta forma, se disminuye el riesgo de pinchazos accidentales entre el personal sanitario; además de preservar la dilución de la contaminación.
Para su montaje se requiere un envase para perfusión intravenosa de suero fisiológico, donde se hará la correspondiente formulación farmacológica, un equipo de infusión con cono Luer Lock, una llave de tres vías, una jeringa y una aguja (Figura 1). Durante el procedimiento se requieren tres acciones consecutivas: acción de aspiración usando el émbolo de la jeringa, giro de la llave de tres vías y posterior infiltración de la anestesia o tumescencia (Figura 2 y Video 1).
Conclusiones
La IATCC3V es una técnica más segura que el uso de cubetas médicas, ya que no precisa manipular la aguja. Además, esta técnica no es inferior al empleo de cubetas en términos de comodidad para el cirujano y permite mantener una dilución totalmente estéril. Por estos motivos, no recomendamos el uso de cubetas médicas para la administración de anestesia y tumescencia durante la cirugía capilar.
Declaración
No existe conflicto de intereses. Ninguna institución ha proporcionado financiación económica para la realización de la investigación o la preparación del artículo.
Bibliografía
- The National Institute for Occupational Safety and Health (NIOSH). Preventing Needlestick Injuries in Health Care Settings. U.S. Deparment of Health and Human Services. Centers for Disease Control and Prevention. 1999 Nov; Publication Number 2000‑108.
- Kanter L. Accidental needle stick prevention: an important, costly, unsafe policy revisited. Ann Allergy Asthma Immunol. 2006 Jul;97(1):7‑9. https://doi.org/10.1016/S1081-1206(10)61363‑4
- Perry J, Robinson ES, Jagger J. Nursing2004 needle-stick and sharps-safety survey: getting to the point about preventable injuries. Nursing. 2004 Apr;34(4):43‑7. https://doi.org/10.1097/00152193-200404000‑00041
- Bierman W. A three‑way infusion valve for biologic fluids. Am J Surg. 1948 Aug;76(2):232. https://doi.org/10.1016/0002-9610(48)90080‑4
- Lapid O. Syringe-delivered tumescent anesthesia made easier. Aesthetic Plast Surg. 2011 Aug;35(4):601‑2. https://doi.org/10.1007/s00266-010‑9625‑4